Twitter vs. Plurk, o cómo matar el ocio más efectivamente

Como la mensajería instantánea (Messenger, Gtalk, etc.) está ahorita de capa caída y todo el mundo y su gato tiene un blog, la siguiente gran moda para los que integramos esta maravilla que es la Web 2.0 es el micro-blogging. Es básicamente blogueo en miniatura: escribes o que quieras pero en muy poco espacio. Por supuesto que esto te da nuevas oportunidades de comunicarte con la gente, tanto propios como extraños.

El mejor y más exitoso de los servicios de micro-blogging que han salido es, sin duda alguna,
Twitter. Lo que ha hecho este servicio tiene a todos los críticos, expertos, analistas y sus mismos fanáticos y detractores rascándose la cabeza con un enorme signo de interrogación sobre ellos. Ya he hablado brevemente antes de él, e incluso logré convencer a mi jefe que publicáramos un reportaje sobre él. De modo que simplemente les recordaré: Twitter es un servicio donde debes contestar (teóricamente) en menos de 140 caracteres la pregunta "¿Qué estás haciendo?". Listo. Eso es todo.

Pero el 29 de mayo pasado, una de las bases de dato de Twitter hizo
kaput. Eso hizo que el servicio de mensajería instantánea de Twitter muriera santamente. La aparición de la "ballena de fallo" se hizo pan nuestro de cada día, pues el servicio no podía soportar la cantidad de mensajes que llegaban. De modo que ahora, sólo el servicio por la página era posible. En un momento, no se veían las respuetas individuales (las precedidas por @), no se podían buscar los históricos, y las aplicaciones externas se vieron enormemente limitadas.

Cada vez que había un bajón
severo, los twitteros se iban a otros sistemas, buscando satisfacer la necesidad de comunicarse con otros. Primero se probó con Jaiku, una adquisición de Google que, hasta ahora, no ha surgido. Como se concentraron más en mensajes móviles, en lo que el sistema volvió sólo se quedaron los que usaban Jaiku desde antes. Luego, se probó con Pownce, que algunos describen como "Twitter con esteroides". Este tiene la ventaja que permitía compartir el envío de archivos como fotos y videos. Pero Pownce quedó más para empresas, y una vez más, cuando Twitter funcionó, oootra vez volvieron.

Pero fíjense cómo son las cosas: justo cuando cayó la base de datos en mayo, apenas una semana antes, apareció el que hasta ahora ha sido el competidor más duro del servicio del pajarito: Plurk.

Una primera ventaja que le veo a este nuevo microbloguero es que hay como un extraño sentido del humor en todo. Digo, nada más miren las caricaturas que lo pululan, la forma en que escriben los FAQ. Es evidente que no se toman demasiado en serio.
Segundo, en vez de ordenar los mensajes en páginas, como Twitter, lo organizan como una línea de tiempo, con los mensajes (plurks) más nuevos apareciendo a la derecha, y uno se puede mover con un poco más de facilidad. Tercero, cada plurk, aunque sigue limitado a 140 mensajes, puede ser respondido individualmente. Entonces, hay cuatrocientas conversaciones ocurriendo simultáneamente y son más fáciles de seguir aquí que en Twitter. Y sí, también se pueden compartir archivos, como fotos y videos. Es, por decir lo menos, divertido de usar.

Ah, y tiene un sistema de chantaje (porque estemos claro, eso es) llamado "karma": entre más plurkees, más sube tu karma. Y eso te da la posibilidad de personalizar tu perfil, cambiar los colores, y tener acceso a más emoticones en tus conversaciones. Ah sí; tiene emoticones al estilo MSN. ¿Qué les parece?


Síp, abrí una cuenta en Plurk. Síp, mi karma ya va por cuarenta y pico. Y hubo un día en que sencillamente no abrí Twitter. Por primera vez en los creo que seis meses que tengo cuenta ahí.
Pero después, volví. Aún no he soltado la cuenta en Plurk ni creo que lo haga (si me quieren seguir: http://www.plurk.com/user/Jaycer17), pero ahora twitteo mucho más de lo que plurkeo. ¿Por qué volvemos?

En primer lugar, Plurk es muy divertido, pero yo hago mucho esta comparación: Twitter quiere ser mi amigo, pero Plurk quiere mi alma. Plurk
exije atención, precisamente por su interfaz, en cambio Twitter puede ser ignorado un rato. Yo no puedo usar Plurk en el trabajo por más de quince minutos, antes de que vea que si no escapo, me abosrberá al punto del despido. Twitter, por su parte, se queda ahí tranquilito.

Y segundo, Twitter es atractivo precisamente por su simpleza. Google triunfó porque su página principal consistía en un logo, un cuadro de búsqueda, y texto. Listo. Twitter simplemente te pide que escribas lo que estás haciendo. ¿Quieres hablar con los demás sobre lo que ellos hacen? Bien. ¿No tienes la paciencia para calarte a la ballenita de marras mientras finalmente se deciden a arreglarlo para que funcione de verdad? Pues use Plurk, que hasta ahora no se ha caído ni tanto.

Pero Twitter ya tiene una bonita comunidad, donde ya puedo decir que he hecho amistades. Incluso se han descubierto usos para Twitter para periodistas en diversos blogs, como
Read/Write/Web, MakeUseOf.com y otros.

En resumen, no me voy de Twitter. Me he instalado ahí, y es como una casa en Internet. Pero sí admito que le montaré cacho con Plurk más que de vez en cuando. Les invito a seguirme en
http://www.twitter.com/Jaycer17.

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1 Response to Twitter vs. Plurk, o cómo matar el ocio más efectivamente

  1. Completamente de acuerdo contigo. Plurk fue y sigue siendo novedoso. Pero el plurk te absorbe demasiado el tiempo y cuando te das cuando has pasado todo el día ahi metido. En cuanto a twitter, su simpleza es lo mejor, aunque a veces la ballenita nos desespere, pero por lo menos yo siempre twitteo. Si he conocido a todos ha sido gracias al Twitter. Yo solo quiero saber que onda cuando llegue al karma 100, si no pasa nada, lo dejaré. Pero bueno, esa es la duda de los que luchamos por conseguir karma, no? :-P

    Buen post.

    Saludos

    La Chika de la Luna